Entre los medicamentos recomendados para combatir los desagradables hongos que pueden afectar el cuerpo está el clotrimazol. Es un antimicótico o antifúngico comúnmente usado para tratar infecciones. Se prescribe en caso de candidiasis oral y vulvovaginal, dermatofitosis (micosis de la piel), pie de atleta y tinea cruris. Esta última «ataca» la zona inguinal, incluyendo genitales, región púbica y perianal.
El clotrimazol actúa matando los hongos. Se une a sus paredes celulares e impide que sintetice ergosterol, un compuesto equivalente al colesterol, que es requerido por estos microorganismos para que las membranas de sus células se conserven.
El clotrimazol altera la absorción de la pared celular fúngica, inhibiendo la actividad de enzimas dentro de la célula. Algunos análisis señalan que las concentraciones pequeñas de clotrimazol ocasionan la fuga de compuestos de fósforos intracelulares hacia el medio ambiente, en conjunto con la desintegración de los ácidos nucleicos de la célula, así como un incremento en la salida de K+, es decir de potasio. Esto conlleva, de forma eventual, a la muerte de la célula. No se irradia de manera apreciable a través del cuerpo del paciente, pero sí se mantiene en el punto de aplicación.
PRESENTACIÓN e indicaciones del Clotrimazol
El clotrimazol se encuentra en óvulos y en crema. Existen otras presentaciones disponibles en el mercado para el tratamiento intravaginal de la vulvovaginitis, como comprimidos vaginales y crema vaginal con aplicador.
El clotrimazol se recomienda en el tratamiento de las micosis cutáneas superficiales procedentes de dermatofitos o levaduras, también en las infecciones bacterianas secundarias provocadas por cocos Gram positivos.
Es indicado más específicamente en los siguientes casos: Intertrigo (enfermedad de los pliegues de la piel), dermatitis del pañal, tiña, candidiasis vaginal, micosis del oído externo y pitiriasis versicolor.
Por lo general, el clotrimazol se prescribe de la siguiente manera:
- 5 veces al día, durante 14 días, para la candidiasis oral.
- 2 veces al día, mañana y noche, de 2 a 8 semanas, para infecciones de la piel.
- 1 vez al día, a la hora de acostarse, de 3 a 7 días, para infecciones vaginales.
Recomendaciones de uso
- Debe usarse el medicamento tal como se indica. No debe emplearse más de las dosis sugeridas, ni más seguido de lo ordenado por el doctor.
- Las tabletas se deben colocar en la boca y diluir lentamente por 30 minutos. No se mastican o ingieren las tabletas enteras.
- Antes de usar la crema tópica, la loción o la solución, se debe limpiar muy bien la zona afectada y secar. La aplicación de clotrimazol debe hacerse friccionando suavemente hasta que desaparezca casi todo.
- Al terminar la manipulación del fármaco, se deben lavar las manos con abundante agua y jabón.
- Debe evitarse el contacto con los ojos.
COMPOSICIÓN del Clotrimazol
El principio activo de este medicamento es clotrimazol. Cada gramo de crema contiene 10 mg de clotrimazol; y betametasona dipropionato, en 0.5 mg. Los excipientes son: alcohol cetílico; alcohol cetoestearílico; monooleato de sorbitan; vaselina blanca; vaselina líquida; lanolina anhidra; metilparabeno; propilparabeno; propilenglicol; polisorbato; monoestearato de glicerilo y agua purificada.
aplicaciones del Clotrimazol
El clotrimazol, en sus diferentes presentaciones, tiene diversas formas de aplicación. Algunas son:
- Crema. Se debe colocar una delgada capa sobre el área afectada y en los alrededores, efectuando un ligero masaje hasta que se absorba completamente. Esto debe hacerse de 2 a 3 veces al día. Un área de crema de 2 cm es suficiente para tratar una zona del tamaño de la mano, dorso y palma. El tiempo de duración del tratamiento obedecerá al sitio afectado y a las características de la patología. En general se sugiere: Para infecciones por dermatofitos de 3 a 4 semanas, en diagnósticos de pitiriasis versicolor de 1 a 3 semanas, y en candidiasis vaginal o balanitis candidiásica de 1 a 2 semanas. En esta última circunstancia se debe aplicar el medicamento en los labios y zonas adyacentes.
- Óvulos vaginales. Se deben introducir profundamente en la vagina, bien sea 1 o 2 óvulos, en la mañana y en la noche, durante 6 días. Una vez que desaparecen los síntomas, se debe continuar el tratamiento por unos dos días más para evitar reincidencia.
CONTRAINDICACIONES
- No se debe utilizar este medicamento si se manifiesta hipersensibilidad a los derivados azólicos o padecimientos de insuficiencia hepática grave. Tampoco en pacientes hipersensibles al clotrimazol, betametasona dipropionato, otros corticosteroides o imidazoles, o a cualquier ingrediente presente en esta preparación.
- Se debe suspender el tratamiento de clotrimazol si se presenta irritación o sensibilización.
- El uso del clotrimazol debe considerarse durante el embarazo y la lactancia. Es necesario consultar al médico antes de utilizar este medicamento en estas etapas.
REACCIONES al clotrimazol
Dentro de los efectos secundarios asociados al uso de clotrimazol pueden citarse eritema, picor, burbujas, peladuras, hinchazón, prurito, urticaria y, en general, irritación de la piel.
Entre los signos vinculados directamente con la betametasona se encuentran: sensación de quemadura, irritación, sequedad, comezón, foliculitis, erupciones acneiformes, hipopigmentación, dermatitis perioral, dermatitis de contacto alérgica, maceración de la piel, infección secundaria, atrofia de la piel, estrías y miliaria.
Por todo esto, es preciso recurrir a su utilización solamente bajo prescripción facultativa.
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