Dietas 22
Dieta proteica
El consumo de proteínas es básico para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Estas las encontramos en carnes, pescados, lácteos y huevos. También se hallan en algunos vegetales como la quinoa, las legumbres y las nueces.
Dieta de la luna
Si como lo lee. Según antiguas creencias, la luna además de influir en las mareas y el funcionamiento del planeta, también podría ayudar a bajar de peso y a desintoxicar el organismo, por lo que Rolando Ricci creó la llamada dieta de la luna.
Dieta alcalina
Si de algo hay que estar claro en materia de salud y belleza, es que las dietas milagrosas no existen, así sus fanáticos digan lo contrario.
Dieta de la piña
Está claro que cuando se trata de alimentación se debe ser precavido. Lo que a veces comienza como un simple interés por perder algo de peso, puede terminar en obsesión o, peor aún, en enfermedad. El ansiado deseo por lograr resultados “rápidos” o “milagrosos” incita a tomar caminos “fáciles”, sin temor a echar por tierra ese equilibrio nutricional del que tanto hablan los especialistas. En esos caminos “exprés” que conducen al adelgazamiento fácil (más no provechoso), destaca la dieta de la piña. Con el tiempo se han creado diversas variantes, con algunas diferencias en la cantidad de días y en los productos que la complementan, pero todas prometen una reducción de peso de hasta cinco kilos. ¿Y cómo no? si excluye los carbohidratos y abusa de la piña.
Dieta hipocalórica
Puede que sea cierto. La dieta hipocalórica ayuda a perder peso de forma saludable, pero sólo será posible con la correcta supervisión de un especialista. Factores como la edad, sexo, estatura, actividad física, niveles hormonales, condición metabólica y predisposición al estrés, entre otros, deben evaluarse antes de decidir el método más conveniente, según las necesidades de cada quien.
Dieta Scarsdale
Es normal que queramos lucir bien y mantener la figura, pero “atentos” con lo que hacemos para lograrlo. Si el objetivo es perder peso en poco tiempo, existen muchos planes nutricionales, pero antes de elegir cualquiera de ellos, conviene buscar la asesoría de un especialista. Uno de ellos es la dieta Scarsdale que, aparentemente, permite bajar siete kilos en dos semanas, con un menú de 1200 calorías diarias.
Dieta del limón
Ya sea para bajar de peso o eliminar impurezas, eventualmente es sano depurar el organismo. Existen diferentes métodos, pero uno de los más populares es la dieta del limón. Sus propiedades digestivas y desintoxicantes, y su alto contenido de vitamina C, favorecen la quema de calorías.
Dieta disociada
“Bajar de peso comiendo de todo”. Parece un sueño, pero no es así. La llamada dieta disociada presenta un plan de alimentación que no contempla la restricción de alimentos, sino la distribución “inteligente” de los mismos. Según lo que plantea, hay productos que sencillamente no deben mezclarse porque el sistema digestivo es incapaz de procesarlos correctamente.
Cronodieta y crononutrición
Al hablar de dietas es difícil no caer en controversias. Las opciones son innumerables y en su mayoría van precedidas de palabras que, aunque alimenten nuestras ilusiones, no son más que engaños peligrosos: “relámpago” y “milagrosa”.
La dieta de la manzana
Bajar de peso suele ser una necesidad, muchas veces vinculada con la estética. Pero también es cierto que el sobre peso actúa de manera negativa sobre todo el funcionamiento de nuestro organismo. Las dietas que nos permiten bajar esos kilos o libras de más, siempre deben estar bajo supervisión de especialistas para evitar que la posible solución termine convirtiéndose en un problema para la salud. Existe una dieta que entraña pocos riesgos, la dieta de la manzana.