Medicamentos 104
Loratadina
Por su efecto antialérgico se recurre a la loratadina cuando hay presencia de mucosidad, estornudos, escozor en nariz, garganta y ojos. Este fármaco brinda alivio a las alergias ocasionadas por el polvo y las sustancias del ambiente. Es sumamente eficaz contra la fiebre del heno, es decir, la reacción alérgica provocada por el polen de ciertas plantas
Aciclovir
El aciclovir forma parte de una clase de medicamentos antivíricos llamados análogos de los nucleósidos sintéticos. Se indica contra los tipos I y II de herpes simplex y el virus de la varicela zóster. Su toxicidad para las células infectadas del hombre y los mamíferos es baja.
Atorvastatina
El exceso de lípidos en el torrente sanguíneo puede acortar la esperanza de vida, pues se adhieren a las paredes de las venas y causan enfermedades cardiovasculares. Para corregir esta situación, los científicos desarrollaron las estatinas, un grupo de fármacos que regula los niveles de colesterol malo y disminuye el riesgo de cardiopatías. Una de las más conocidas es la atorvastatina, que controla las plaquetas, produce un efecto antiinflamatorio y evita las embolias.
Pantoprazol
Comúnmente conocido como “protector gástrico”, el pantoprazol es un fármaco que se suele recetar para prevenir el malestar estomacal asociado a la ingesta de ciertos medicamentos. Sin embargo, su función principal es aliviar el reflujo gastroesofágico, una enfermedad que hace que el contenido del estómago regrese al esófago, produciendo irritación.
Clindamicina
La clindamicina es un antibiótico activo que mata bacterias infecciosas. Pertenece a las lincosamidas de origen semisintético, procedentes de la lincomicina. Se administra, principalmente, por vía parenteral, es decir, mediante inyección. Su acción antibacteriana se asemeja a la de la eritromicina. Funciona en el tratamiento de afecciones causadas por estafilococos, estreptococos y organismos anaerobios, especialmente la bacteroides fragilis.
Azitromicina
La azitromicina es uno de los fármacos más recetados para el tratamiento de afecciones virales, debido a que ralentiza la proliferación de bacterias, característica que lo incluye entre los llamados antibióticos macrólidos. Se usa, principalmente, para calmar y erradicar los síntomas de neumonía, bronquitis infecciones en pulmones, oídos, garganta o piel y enfermedades de transmisión sexual.
Zovirax
El zovirax es un medicamento antiviral obtenido de la guanosina (nucleótido trifosfato empleado en el metabolismo celular). Se emplea para tratar infecciones causadas por el virus de la varicela zóster y el herpes simple, entre ellas varicela, estomatitis herpética, herpes labial, herpes genital y herpes zóster.
Indometacina
La indometacina es un fármaco que se receta con suma frecuencia a personas que padecen artritis reumatoide, osteoartritis, dolor muscular y espondiloartropatías, debido a sus poderosas cualidades antiinflamatorias no esteroideas. De igual modo, los especialistas aprovechan su acción inhibidora de las prostaglandinas, para disminuir algunos síntomas asociados con la osteítis deformante, menstruación dolorosa, inflamación de los tendones, cefaleas, bursitis y jaqueca. Por su efecto antipirético, también se receta para aliviar cuadros febriles, especialmente en personas con cáncer.
Naproxeno
El naproxeno es un medicamento analgésico, antibiótico y antiinflamatorio no esteroideo, perteneciente a la familia de los AINE. Es muy utilizado por esta propiedad y por la capacidad que posee de disminuir dolores en los ligamentos, tendones, músculos y articulaciones.
Clotrimazol
Entre los medicamentos recomendados para combatir los desagradables hongos que pueden afectar el cuerpo está el clotrimazol. Es un antimicótico o antifúngico comúnmente usado para tratar infecciones. Se prescribe en caso de candidiasis oral y vulvovaginal, dermatofitosis (micosis de la piel), pie de atleta y tinea cruris. Esta última «ataca» la zona inguinal, incluyendo genitales, región púbica y perianal.