La colitis ulcerosa es una enfermedad que se produce cuando se inflama de manera crónica el tubo digestivo. La afectación suele aparecer en forma de brotes recurrentes.
Esta patología afecta el colon, frecuentemente en el ano. Igualmente puede manifestarse en otras áreas que no incluyen el aparato digestivo, como la piel, el hígado o las articulaciones. La enfermedad de Crohn también se relaciona con la colitis ulcerosa.
Aún no se conoce la causa de la colitis ulcerosa. Comúnmente quienes la padecen sufren problemas en su sistema inmune, aunque no un vínculo específico que determine que esta sea la razón de que aparezca la patología. También se señalan factores como el estrés y el consumo de ciertos alimentos en la exacerbación de los síntomas.
No hay edad establecida para la incidencia de la colitis ulcerosa, que también puede afectar en igual medida a hombres y mujeres. Sin embargo, estudios clínicos señalan que existen dos picos etarios en los que aparece: entre los 25 y los 35 años, y entre los 65 y los 75 años.
Síntomas de la Colitis ulcerosa
Los pacientes con colitis ulcerosa pueden sufrir síntomas que van desde leves a muy graves. Éstos pueden intensificarse gradualmente o aparecer de manera repentina.
Entre las señales de la afección están dolor abdominal, cólicos y un sonido de gorgoteo que se escucha sobre el intestino. Las heces vienen acompañadas de pus y sangre.
También suelen haber episodios de diarrea frecuentes, cólicos, dolor y una sensación constante de evacuar, aunque los intestinos estén vacíos.
Otros síntomas de la colitis ulcerosa son fiebre, pérdida de peso, retardo en el crecimiento de los niños, dolor e hinchazón articular, úlceras bucales, náuseas, vómitos y protuberancias o llagas en la piel.
Quien padece de colitis ulcerosa tiene un riesgo mayor de sufrir cáncer de colon y las posibilidades aumentan tras 10 años de sufrir la patología.
Sin embargo, si se acude al médico y se mantiene una supervisión médica, los pacientes pueden llevar una buena calidad de vida, a pesar de los brotes de esta enfermedad.
Diagnóstico de la colitis ulcerosa
Como en muchas otras enfermedades, un diagnóstico temprano de la colitis ulcerosa evitará futuras complicaciones, pues se someterá a un tratamiento oportuno.
Para determinar la existencia de la patología es necesario practicar una colonoscopia con biopsia, que sirve además para descartar un cáncer de colon.
Otros exámenes que ayudan al diagnóstico son el enema opaco y el conteo sanguíneo completo, de proteína C reactiva y la tasa de sedimentación eritrocítica.
Es recomendable que tras 10 años del diagnóstico, se hagan biopsias múltiples y biopsias estrechas.
Tratamiento de la Colitis ulcerosa
El tratamiento de la colitis ulcerosa está orientado a controlar los ataques agudos, prevenir los brotes recurrentes y sanar el colon.
En muchas ocasiones es preciso que el paciente acuda a un centro hospitalario para tratar los episodios graves de la colitis ulcerosa. A menudo el especialista receta corticosteroides y nutrientes por vía intravenosa.
El enfermo también tendrá que cuidar su alimentación, pues hay comidas que empeoran síntomas como los gases y la diarrea.
Por ello, hay que evitar el consumo de alimentos con un alto contenido de fibra como salvado, frijoles, nueces, semillas y palomitas de maíz. Igualmente, se debe excluir de la dieta las comidas grasosas, las frituras y salsas.
Si el paciente sufre de intolerancia a la lactosa debe limitar el consumo de lácteos, pero sin eliminarlos pues son un gran aporte de proteína y calcio necesarios para el organismo.
Las cantidades de comida también deben disminuirse y el agua debe ingerirse con gran abundancia y regularidad.
las emociones deben cuidarse
Está comprobado que las emociones estresantes empeoran los síntomas de los problemas digestivos e intestinales.
Quienes padecen de colitis ulcerosa se sienten tristes, deprimidos o avergonzados por su enfermedad. Igualmente, si el paciente atraviesa por emociones intensas como una mudanza, la pérdida del trabajo, la muerte de un ser querido o una ruptura amorosa, podría sufrir complicaciones.
Si se siente que no se puede manejar el estrés, se debe buscar ayuda psicológica,
Quirófano
Es posible recurrir al quirófano para practicarse una cirugía para extirpar el colon y curar la colitis ulcerosa, además de eliminar el riesgo de desarrollo de cáncer.
El médico puede recomendar una cirugía a los enfermos de colitis ulcerosa que no responden al tratamiento farmacológico y al cambio de alimentación. Igualmente, si se notan cambios en el revestimiento del colon que pueden llevar al cáncer o si se tienen problemas graves como ruptura del colon, sangrado intenso o megacolon tóxico.
La mayoría de las veces, se extirpa el colon entero, incluso el recto, por lo que será necesario que el especialista realice una abertura en el abdomen llamada estoma, para que las heces sean expulsadas a través de ellas. De igual modo, se puede realizar una técnica que consiste en conectar el intestino delgado con el ano para lograr un funcionamiento intestinal más normal.
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