Entre los padecimientos más comunes se encuentra la diarrea. Afecta a personas de todas las edades, pudiendo provocar la muerte si no se atiende oportuna y adecuadamente. La afección provoca repetidas deposiciones (tres o más veces al día), con heces sueltas o líquidas, y puede ser tratada con un medicamento denominado loperamida. Se trata de un opioide y derivado sintético de la piperidina, que se prescribe para el control de procesos diarreicos originados por bacterias, virus o parásitos, y otros asociados a la enfermedad inflamatoria intestinal.
También se utiliza para el tratamiento sintomático de la diarrea ocasional. Es indicado para erradicar los movimientos y secreciones intestinales, por lo que produce reducción de las deposiciones liquidas. La loperamida incrementa el tono del esfínter anal, reduciendo de esta forma la incontinencia y urgencia.
Loperamida en pacientes con ileostomía
La loperamida puede usarse para disminuir el número y volumen de las deposiciones y para aumentar la consistencia del contenido fecal en pacientes con ileostomía, cirugía mayor que consiste en la exteriorización del íleon a la pared abdominal, habitualmente en el cuadrante inferior derecho del abdomen.
Absorción del medicamento
La mayoría de la loperamida que se ingiere se absorbe en el intestino. Sin embargo, la biodisponibilidad sistémica es solamente de aproximadamente 0,3%, debido a un significativo metabolismo de primer paso.
La loperamida no traspasa la barrera hematoencefálica, la cual aparta el cuerpo del cerebro, por ello no actúa como un opioide habitual, es decir que no tiene efectos cerebrales, pero sí estimula el estreñimiento, muy útil cuando la diarrea es aguda.
Presentacion comercial de la Loperamida
La loperamida se presenta en cápsulas, comprimidos y solución oral. La cápsula posee 2 mg de principio activo. Los demás componentes son lactosa monohidrato, sílice coloidal anhidra, almidón pregelatinizado de maíz sin gluten y estearato de magnesio.
El comprimido contiene manitol y cada ml contiene 0,2 mg del principio activo. Los excipientes son sacarina sódica, aroma de frutos como frambuesa y grosella, colorante rojo, Ponceau 4R (E-124), metilparabeno, propilparabeno, ácido cítrico, glicerol (E422) y agua purificada.
La solución oral, por su parte, se compone de colorante rojo Ponceau (E124) y glicerol (E422).
Vía de administración y dosis de la Loperamida
La vía de administración de la loperamida es oral. La dosis, tanto para la diarrea aguda como para la crónica, en adultos y adolescentes, es de 4 mg luego de la primera evacuación. Posteriormente se deben ingerir 2 mg después de cada deyección.
Para el mantenimiento se indican entre 4 mg y 8 mg al día, fraccionadamente de acuerdo a las necesidades del individuo. No deben superarse los 16 mg por día.
Si el paciente es pediátrico, no se recomienda loperamida de manera rutinaria porque la diarrea debe ser tratada de forma causal, es decir, según la causa que la provoque. Una vez que ésta se haya determinado, la dosis máxima para niños de 2 a 5 años es de 1 mg, en presentación líquida, 3 veces al día. Si tienen entre 6 y 8 años se sugieren 2 mg, 2 veces al día, y si sobrepasan esa edad, convienen los mismos 2 mg, 3 veces al día.
Contraindicaciones
La loperamida no debe ser administrada en los siguientes casos:
- Niños menores de 2 años.
- Personas que no deben presentar estreñimiento.
- Pacientes con colitis ulcerosa, colitis seudomembranosa o con disfunción hepática. Si es indispensable su administración debe utilizarse con precaución.
- Pacientes con disenteria aguda, caracterizada por presencia de sangre en las heces y fiebre alta.
- Personas con hipersensibilidad, es decir, alergia a la loperamida. Entre los síntomas que pudieran presentarse destacan crisis de asma, dificultad respiratoria, hinchazón de cara, labios, lengua u otro lugar del cuerpo, urticaria, picor y erupción cutánea.
Efectos Adversos de la Loperamida
Los efectos adversos de la loperamida se presenta comúnmente en el aparato digestivo, entre ellos calambres o distensión abdominal, mareos, náuseas, vómitos, estreñimiento, dolor de cabeza, erupción, vértigo, resequedad en la boca, astenia, somnolencia y erupciones exantemáticas.
Información Importante
La diarrea puede originar deshidratación, por lo que es de suma importancia el consumo abundante de sueros o agua para reponer líquidos y electrólitos perdidos en el proceso diarreico. Debe tenerse mayor cuidado con los niños y personas mayores.
Si se incurre en una ingesta accidental o sobredosis del medicamento y se presentan signos de somnolencia, hipertonía muscular, miosis, depresión respiratoria e incoordinación entre otros, se debe acudir al médico para efectuar un lavado gástrico y administrar naloxona, fármacos indicados para interrumpir las intoxicaciones.
Es fundamental conservar la loperamida en lugar seco y a temperatura ambiente, a no más de 30° C.
Esta medicina es muy recomendada para la llamada diarrea del viajero caracterizada por la presencia de heces acuosas. Frecuentemente es contraída por las personas que toman agua que no está debidamente limpia o alimentos manipulados de forma inadecuada.
Quien se encuentre de visita en otro país y requiera loperamida, debe consultar en la farmacia antes de adquirirlo porque puede variar su composición en distintas naciones. La solución oral, por ejemplo, puede contener alcohol.
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