El termino peste procede del término latino pestis que significa epidemia, perdición. Existen muchas variantes, pero particularmente la peste bubónica, es una enfermedad infectocontagiosa, provocada por la bacteria baciliforme Yersiniapestis, bautizada así en honor al bacteriólogo suizo Alexandre Yersin, quien la descubrió en el año 1894.
La primera gran pandemia de lo que pudo haber sido peste bubónica, se registró en la época antigua, en el Siglo VI DC. Tuvo una duración de 60 años, se originó en Egipto, y se extendió hasta Palestina.
En el siglo XIV, entre los años 1346 y 1353, otra gran epidemia azotó a casi todo el continente europeo acabando con unas 50 millones de personas. Apareció en Asia y llegó a Europa a través de las rutas comerciales. Se conoció mundialmente como la peste negra, y la más común de sus manifestaciones fue la peste bubónica.
Formas de Contagio
La bacteria Yersiniapestis se encuentra en las pulgas, siendo éstas el vector principal de la peste bubónica, y de otras patologías similares como la peste pneumónica y la peste septicémica.
Las pulgas la adquieren de la superficie corporal de los huéspedes infectados donde viven, principalmente roedores salvajes como ratas y ardillas. La transmiten a los humanos por picaduras, ingesta o contacto directo con tejido contaminado. Es decir, las personas se contagian de peste bubónica si son picadas por una pulga infectada, o si los componentes de la bacteria entran al organismo mediante una herida o llaga en la piel.
El hombre es un huésped accidental, porque las pulgas busca en él la sangre que ya no encuentran en los roedores, por estar enfermos con peste bubónica.
Generalmente, la epidemia inicia como brotes en estos animales, y las pulgas los desalojan para escudarse en los humanos.
Síntomas de la Peste Bubónica
La peste bubónica ataca al sistema inmunológico. El periodo de incubación fluctúa entre dos y ocho días. El síntoma más característico es la aparición de pústulas de sangre, que son hemorragias cutáneas de color negro azulado. Otras manifestaciones son escalofríos, fiebre elevada, dolor de cabeza, astenia o decaimiento, malestar general.
Cuando hay peste bubónica duelen y se inflaman los ganglios linfáticos, habitualmente los de las axilas, cervical e ingle, los cuales pueden crecer hasta diez centímetros, llegando a juntarse y a formar masas irregulares que se abren para drenar su contenido.
En estos casos, es urgente el tratamiento con antibióticos recomendados clínicamente para evitar la muerte.
La no administración de este fármaco deriva una mortalidad de más del 50%, debido a las complicaciones que surgen en los órganos, como lesiones purulentas, necróticas y hemorrágicas. Incluso puede generarse una coagulación intravascular diseminada o una meningitis.
Diagnostico DE LA PESTE BUBÓNICA
En su fase inicial, la peste bubónica pudiera confundirse con una infección gripal, por lo que es necesario analizar el esputo, la sangre o el pus de los ganglios linfáticos, mediante cultivos.
Tratamiento y pronóstico DE LA PESTE BUBÓNICA
Como se dijo, el tratamiento indicado para la peste bubónica es la administración precoz de antibióticos, preferiblemente dentro de las 24 horas de la aparición de los síntomas. Solo así se podrán evitar consecuencias fatales.
Afortunadamente, los viejos antibióticos siguen siendo muy eficaces para el paciente y para la profilaxis, entre ellos la estreptomicina, la gentamicinatetraciclina y la oxitetraciclina.
Los pacientes graves necesitan cuidados intensivos y otras terapias de mantenimiento, para no empeorar el cuadro clínico.
Las posibilidades de cura dependen de la evolución y del tratamiento aplicado. El pronóstico puede ser muy bueno, bajando el número de casos mortales entre 1 y 5% en los países desarrollados.
Medidas preventivas
La medida preventiva más eficaz es la lucha contra ratas y pulgas en las regiones de difusión del germen patógeno. No obstante, las medidas personales de protección pueden ayudar,
Es pertinente que las personas con peste bubónica sean aisladas para evitar nuevos casos, igualmente quienes tuvieron contacto directo con el enfermo deben permanecer, por lo menos, una semana bajo aislamiento y tomar antibióticos durante siete o más días, según lo indicado por el especialista.
Situación actual DE LA PESTE BUBÓNICA
Actualmente existen países como África, donde cada año la Organización Mundial de la Salud reporta alrededor de 2 mil casos, sin contar los que se quedan sin detectar. Aparentemente también ha habido incidencias recientes, aunque no mortales, en ciudades pobres de Estados Unidos como Colorado, California y Arizona.
En zonas desérticas, montañosas y con deficientes condiciones higiénicas también continúa la peste bubónica. De allí que ha habido diagnósticos en Asia, América del sur y-en menor escala-en América del Norte. Los países más endémicos son Madagascar, la República Democrática del Congo y el Perú.
A pesar de existir vacunas contra la peste no resultaron muy eficaces. De hecho, no se recomienda su aplicación durante un brote. Solo se administran a grupos de alto riesgo como el personal que está constantemente expuesto al riesgo de contaminación.
Es una afección que puede propagarse muy rápido, por lo que se aconseja contactar de inmediato con los Departamento de Salud Publicas o Centros de Control y Prevención de Enfermedades si se sospecha de haber estado expuesto a la bacteria que ocasiona la peste.
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