La próstata es una glándula que forma parte del sistema reproductor y urinario masculino. Es más o menos del tamaño de una nuez y envuelve a la uretra, tubo situado debajo de la vejiga. En los hombres jóvenes la próstata es de pequeño grosor, pero a medida que avanzan en edad, ésta va tomando mayores dimensiones como parte de su proceso de desarrollo normal. El problema se presenta cuando se agranda de manera exagerada, ya que puede ser causa de alguna enfermedad como la prostatitis o próstata inflamada.
La prostatitis o próstata inflamada es un padecimiento que produce una inflamación o irritación en la próstata, por lo que es necesario investigar sus orígenes y consecuencias.
FUNCIÓN DE LA PRÓSTATA
La próstata cumple dos funciones: consentir el recorrido de la orina expulsada desde la vejiga y admitir el paso del semen durante la eyaculación. Efectivamente, el semen es una composición de esperma y líquido procedente de la próstata.
CAUSAS DE LA Próstata inflamada
La próstata inflamada puede producirse por dos motivos diferentes: una infección o la presencia de algún padecimiento de tipo funcional.
Si la inflamación ocurre por una infección, se le denomina prostatitis, y se debe a la aparición de organismos diminutos que contaminan la glándula, o bacterias que inducen a que se dilate como mecanismo o reacción defensiva. Dependiendo de la gravedad, puede diagnosticarse una prostatitis bacteriana aguda o crónica. El procedimiento para identificar este tipo de casos, es realizar un examen a una muestra de orina.
Si la próstata inflamada es por causas funcionales, puede estar relacionado con la acción o funcionamiento de las hormonas sexuales masculinas. Esto es algo normal en ciertos hombres, por lo que no suele ser de mayor importancia, y puede tratarse con distintos medicamentos.
Cuando no existe evidencia de ninguna de las causas citadas, se puede estar en presencia de una prostatitis no bacteriana, que se caracteriza por dolor urinario y genital durante un tiempo de al menos tres meses. No se localizan bacterias en la orina, sin embargo pueden existir distintos signos de inflamación.
También puede evidenciarse una próstata inflamada en hombres que tienen piedra en el riñón o cáncer, por lo que es necesario controlar la evolución de la misma periódicamente.
SÍNTOMAS DE LA PRÓSTATA INFLAMADA
Los síntomas varían de acuerdo a la causa. Cuando la próstata se encuentra inflamada por una infección, las molestias pueden ir desde un dolor desagradable en toda la zona abultada, hasta incomodidad al orinar o un ligero sangrado al expulsar el semen.
En cualquiera de los casos es importante consultar a un médico para realizar exámenes y dictaminar el procedimiento ideal que permita disminuir la próstata inflamada.
Si la próstata inflamada tiene que ver con circunstancias funcionales, los síntomas son semejantes a los de la infección, excepto que se mantienen por más tiempo, logrando extenderse por años. La sospecha más característica de la próstata inflamada es que la persona se levanta, durante la noche, varias veces a orinar.
Asimismo el hombre con próstata inflamada o prostatitis, presenta uno o más de estos signos: Impresión de ardor al expulsar la orina, deseos de orinar frecuentemente, escalofríos, problemas al orinar, fiebre y cansancio.
También pueden surgir molestias en el abdomen inferior, dolencias cerca del ano o en la ingle. La próstata inflamada induce además a un chorro de orina menos fuerte y con sangre. En algunos casos pueden presentarse dolores pélvicos al eyacular y durante el sexo.
La próstata inflamada es considerada aguda cuando la sintomatología no sobrepasa las dos semanas, y crónica si persiste más de tres meses. En ciertos casos la próstata crónica se deriva de una prostatitis aguda.
DIAGNÓSTICO de la Próstata inflamada
La medicina actual cuenta con diversos estudios para determinar las causas de una próstata inflamada. Si se sospecha que la próstata inflamada es originada por una infección, se efectúa un análisis de orina, un cultivo de esperma o un examen de sangre.
Si por el contrario es debido a causas funcionales, pueden requerirse procedimientos como una flujometría y una ecografía de la próstata, que van a permitir precisar el grado de la inflamación.
TRATAMIENTO de la Próstata inflamada
El inconveniente de la próstata inflamada se cura siguiendo un tratamiento específico, que va a depender del tipo de patología diagnosticada. Si se debe a una infección, el tratamiento consistirá en la administración de antibióticos, y el lapso del mismo se indicará según el grado de infección que se tenga
Si el origen de la próstata inflamada son causas funcionales, el procedimiento consistirá en una intervención quirúrgica, aunque cuando el estado de la inflamación no es muy grande, con la ingesta de fármacos se logra remediar el problema.
Es importante destacar que el problema de la próstata inflamada afecta psicológicamente a los hombres porque la próstata está relacionada con la potencia y capacidad sexual. Es posible que experimente sentimientos de temor y frustración ante el diagnóstico. Es el médico especialista quien debe orientar al paciente para que no hayan juicios a priori que perturben la confianza en sí mismos.
Por otra parte, es cierto que, frecuentemente, son los hombres mayores quienes padecen de trastornos de la próstata, siendo un proceso propio de la edad como cualquier otro. Sólo los estudios constantes ayudarán a evitar cualquier daño inesperado.
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