La tos, como la tos seca, es un mecanismo natural que el organismo utiliza para limpiar las vías respiratorias. Pese a lo que muchas personas creen, no es una enfermedad en sí misma, sino un síntoma de las patologías que afectan al aparato respiratorio.
La tos se clasifica en tos productiva, que va acompañada de segregación o moco, y tos seca, que no genera flema y se presenta en horas nocturnas.
Cuando la tos seca perdura por más de diez días, puede constituir el signo de una condición médica que amerite tratamiento rápido y oportuno.
Causas de la tos seca
Entre las causas de la tos seca se citan: irritación en la garganta superior, resfriado, infecciones virales causantes de gripe, alergias y reflujo ácido, así como exposición a sustancias irritantes como humo, polvo y vapores químicos.
Igualmente, la tos seca puede ser el efecto secundario de ciertas medicinas o de malos hábitos como el cigarrillo.
Uno o la combinación de varios de estos factores, puede incidir en una tos persistente o crónica, o en una tos seca-aguda.
Tos crónica
Dura más de tres semanas. Se asocia con la inflamación de las vías aéreas y la presencia de afecciones rinosinusales como rinitis, sinusitis y poliposis. Se subdivide en tos de fumador y tos psíquica o nerviosa.
El asma bronquial es otra causa. Por lo general uno de cada tres pacientes con tos crónica es diagnosticado con asma bronquial. De hecho, la tos crónica puede ser el único síntoma de dicho padecimiento.
El reflujo gastroesofágico también la origina. Se estima que el 5 % de los enfermos de tos crónica tiene bronquitis crónica.
Del mismo modo, condiciones severas como tuberculosis o deficiencias cardiacas, pueden generar tos seca persistente o crónica, muchas veces difícil de controlar.
Tos seca-aguda
Provoca mucha fatiga e irritación de las vías respiratorias. Conlleva a la diseminación de gérmenes, debido a los movimientos espiratorios violentos que provoca en el paciente.
Entre los detonantes de este tipo de tos se encuentran la bronquitis aguda y la tos ferina, que suele venir acompañada de vómito.
Asimismo, puede ser ocasionada por laringitis o tos ronca, ingestión en las vías aéreas, faringitis y, en casos más gravas, por cáncer de laringe.
Tos seca en los niños
Los niños de cualquier edad pueden padecer tos seca, generando gran preocupación en los padres, quienes acuden a la consulta pediátrica en búsqueda de tratamiento para aliviar el malestar.
En este grupo, la tos seca suele ser aguda, presentándose frecuentemente en épocas o estaciones frías; normalmente durante la noche, y combinada con insomnio.
Tratamiento para la tos seca
Cuando la tos seca es detonada por un resfriado, se suelen administrar medicamentos de venta libre como suplementos de Zinc, para reducir sus síntomas y duración, o pastillas mentoladas para disminuir la irritación de garganta.
También se pueden recomendar medicamentos líquidos con Dextrometorfano, que inhibe las ganas de toser, o Guaifenesina, que ayuda a disolver el moco.
Algunas personas recurren a los remedios caseros, pero cuando la tos persiste y se torna intensa y molesta, es mejor acudir a consulta ambulatoria.
Durante la revisión, los médicos realizan una exploración física para examinar oídos, nariz, garganta y tórax, a la vez que interrogan al paciente sobre la evolución de la afección.
El objetivo es encontrar la causa subyacente para atacarla directamente con los fármacos correspondientes, puesto que los sugeridos para la tos la calman, pero no la curan.
Remedios caseros para la tos seca
Desde tiempos remotos la medicina natural ha sido utilizada para curar la tos tanto en los niños como en los adultos, por ello hay una gran variedad de remedios caseros que brindan buenos resultados.
Uno de los más efectivos es la miel con leche o diluida en un te tibio de eucalipto, jengibre, rábano, semillas de linaza o limón, entre otras muchas.
La mezcla de ajo con aceite de oliva se toma para descongestionar los bronquios aliviando a su vez la tos seca, al igual que la limonada caliente sola o con algunas hierbas.
Otra opción sana es un agradable jarabe preparado con agua de tilo, anís, manzanilla y clavos dulces. Para obtenerlo se deben hervir todos estos ingredientes por varios minutos y luego agregar miel con jugo de limón.
El zumo de zanahoria es muy apropiado, por sus nutrientes y vitaminas que proporcionan alivio a diversos síntomas de la tos.
Consumir uvas ayuda a deshacerse de la mucosidad, mientras que tomar una salsa de pasas molidas con un poco de agua, o una pasta suave de almendras remojadas controla la agitación producto de la tos.
Se puede preferir inhalar vapor de un preparado de plantas medicinales en agua caliente, para incrementar la humedad en el aire y reducir la resequedad en la garganta.
El consumo de líquidos es vital, ya que permite diluir la flema en la garganta, manteniéndola hidratada para que no se irrite y facilite la expectoración
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