Xantomas

La piel no sólo sufre las inclemencias del tiempo o el medio ambiente, sino que también refleja los padecimientos de nuestros órganos internos. Los xantomas, por ejemplo, son afecciones cutáneas asociadas-generalmente-a problemas con el hígado o a trastornos metabólicos de los lípidos. Lucen como masas de grasa acumuladas bajo la piel, de color amarillo y ligeramente elevadas.

Los xantomas son de común aparición en los adultos mayores y las personas con niveles altos de lípidos en la sangre. Su tamaño puede variar. Mientras algunos son diminutos, otros pueden medir hasta 7.5 cm de diámetro.

Cualquier parte del cuerpo es susceptible de desarrollar un xantoma. No obstante, es frecuente en codos, articulaciones, tendones, rodillas, manos, pies y glúteos.

Un tipo particular de xantoma puede aparecer en el párpado. Se conoce como xantelasma palpebral y es bastante común. Éste puede crecer sin estar ligado a otra condición médica subyacente, incluso no estaría relacionado con un alto nivel de colesterol o lípidos.

Causas de los Xantomas

Como se dijo, es posible que un xantoma surja como consecuencia de un trastorno médico, relacionado con el aumento de lípidos en torrente sanguíneo. Algunos de ellos pueden ser:

• Ciertos tipos de cánceres
• Diabetes
• Hiperlipidemia
• Trastornos metabólicos que afectan la capacidad del organismo para procesar sustancias químicas requeridas para la supervivencia, entre ellos porfiria, Enfermedad de Krabbe o hiperplasia suprarrenal congénita.
• Cirrosis biliar primaria, también conocida como colangitis destructiva.
• Pancreatitis
• Hipotiroidismo

¿Cómo identificar los xantomas?

Los xantomas, en sí mismos, no representan un riesgo para su salud. Sin embargo, es vital tratar con urgencia la afección que provoca su aparición. Tome en cuenta que si los xantomas logran un gran tamaño, pueden convertirse en un inconveniente estético.

Los xantomas no suelen causar dolor o sensación de picor, por lo que es posible que no sepa que los tiene hasta que sean evidentes. Usted tiene un xantoma si:

• Observa y palpa una protuberancia debajo de la piel
• Presenta erupciones en la piel que tengan:
• Formas desiguales
• Van de color amarillo a naranja
• Parecen manchas con delimitaciones muy definidas
• Pueden lucir individuales o en forma de racimos.

diagnóstico de los Xantomas

Tener una patología que produzca un incremento de los lípidos en la sangre es la principal característica de un paciente con probabilidades de desarrollar xantomas.

Lo prudente es que su médico le realice una revisión exhaustiva de la piel y sugiera una biopsia, si lo considera necesario, para confirmar que se trate de un depósito de grasa.

El especialista también le indicará exámenes de sangre para constatar los niveles de lípidos, función hepática y descartar diabetes.

Tratamiento de los Xantomas

Se reitera la necesidad de descartar una condición que incremente los lípidos en la sangre. Si existe, debe iniciar un tratamiento rápidamente, pues sólo así podrá disminuir el riesgo de desarrollar xantomas en la piel.

Es común que el especialista aconseje extirpar el xantoma a través de una cirugía láser si éste afecta su estilo de vida de algún modo. No obstante, no existe garantía de que no reaparezca.

Este tratamiento suele ser la opción más elegida ya que:

• No afecta al tejido que rodea el xantoma.
• Permite detener una posible hemorragia con mayor rapidez. Además la curación es muy eficaz.
• No requiere sutura.

Si su doctor confirma que usted padece hiperlipidemia, es prudente evaluar el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Estos exámenes serán hechos en ayunas.

Existen otras alternativas, igualmente fiables para retirar un xantoma:

• Resección quirúrgica
• Laser con CO2 o argón
• Cauterización con químicos
• Electrofulgoración
• Crioterapia
• Radiofrecuencia

Lo cierto es que el xantoma no representa un problema para el desenvolvimiento de sus tareas cotidianas, pero por razones estéticas puede decidir quitarlo con algunos de los métodos antes descritos.

Pronóstico

Los fármacos que su médico le recetará para reducir los lípidos en la sangre tienen pocos efectos sobre el xantoma. Sin importar el tratamiento que escoja para eliminarlo, éste puede volver a aparecer, incluso si sus niveles de colesterol han alcanzado números favorables. La única solución es utilizar cualquiera de las terapias mencionadas.

Si usted decide realizarse una cirugía para retirar el xantoma, tal vez no requiera recurrir a otro tipo de tratamiento, pues suele bastar con una sola sesión. Suponiendo que el depósito de grasa sea demasiado grande o tenga mucha profundidad, la cirugía se programará en dos, eliminando la mayor parte en la primera de ellas.

Prevenir es la clave

Para reducir la predisposición a padecer un xantoma, debe revisar los niveles de triglicéridos y colesterol. Llevar una dieta balanceada es el secreto. Algunos alimentos como los cereales, muy relacionados con la aparición de xantomas, debido a que se  transforman en triglicéridos y colesterol en el organismo, no son beneficios para usted. Excluya de su régimen dietético: pasta, arroz, galletas, tortas, cebada, etc. Inclínese por vegetales y otros alimentos crudos. El ayuno es una opción muy recomendada para tratar con rapidez los xantomas.